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2) Cuz Cuz - Quebrada Cavanilla: En este lugar, ubicado en una quebrada al extremo oriente de Cuz Cuz, existe un grupo de rocas semi derruido que conserva aún una gran cantidad de petroglifos y dos troneras convergentes (2/1/17 y 2/1/16) abiertas hacia el poniente. El último rayo de sol en el atardecer del equinoccio, cae detrás de una roca con forma natural de cráneo humano y sobre una pequeña roca triangular. Penetra por las dos troneras simultáneamente, hacia el interior de una pequeña caverna artificial, con el techo actualmente derrumbado. Este rayo de sol que penetra por ambas aberturas simultáneamente, permite hacer observaciones con una precisión mayor que 1/2 °. Esto da una alta precisión pues el sol en esa fecha se mueve 0,4° diariamente (Bauer y Dearborn 1998) (Figura 2).
3) Cuz Cuz - El Peral: En esta quebrada ubicada 2 km. al norte de la escala de Cuz Cuz, una pequeña piedra de 90 cm de largo, sobresale aproximadamente 10 cms. del suelo. Tiene forma de una punta de flecha, que apunta a la cumbre más alta al sur oriente. En su superficie exhibe un grabado que en la parte inferior representa un meandro con un círculo sobre la curva de mayor tamaño a la derecha. Este meandro parece representar las dos cumbres visibles al sur oriente y el círculo coincide con la posición de salida del sol en el solsticio de verano como muestra la foto superior (Figura 3).
4) El Mauro: En este sitio, 5 petroglifos exhiben dibujos descritos como pisadas de origen Diaguita, por el arqueólogo Gastón Castillo (2004): Sector 9, petroglifos 1, 2, 7. Sector 10, petroglifos 2 y 3. Estos petroglifos están junto a caminos sub actuales y posiblemente de origen arqueológico, que conectan El Mauro con Colliguay, Potrero Alto y Tilama por el sur oeste y Cantarito y Chincolco por el sur este. Ambos senderos confluyen en la Loma Paso del Carretero y pasan junto a estos petroglifos en su descenso hacia el estero Pupío. Estas huellas grabadas en piedra podrían estar indicando la presencia de caminos, importantes por su función de comunicar El Mauro descrito por Castillo (2004) como Tierra Fronteriza, con los asentamientos más allá de las montañas (Figura 4).
5) El Coligüe: En este sitio con presencia Molle y Diaguita investigado por la arqueóloga Alejandra Guerra (Guerra 2004) en el Sector 6, petroglifos 61, 66 a, 66 b, 67 y 70. Muestran personajes a caballo, lo cual indica que se trata de imágenes grabadas en tiempos históricos. En el Sector 6 confluyen diversos senderos subactuales y posiblemente arqueológicos, que conducen hacia Canela, a 6 horas a caballo al sur poniente y hacia Quilitapia, a 6 horas al nororiente. Esta relación jinetes-caminos, se ve confirmada en el Sector 2, petroglifo 3, puesto que el sendero a Canela pasa junto a un petroglifo con un personaje a caballo y una línea que parece representar un sendero (Figura 5).
IV DISCUSIÓN Los antecedentes expuestos muestran que las obras rupestres no pueden ser estudiadas en forma aislada sino en relación a su entorno. Ellas deben ser entendidas dentro de un sistema de coordenadas de tiempo y espacio. Las coordenadas espaciales definen relaciones con: superficie de la roca en que están grabadas, las otras obras, sitios habitacionales, restos en el subsuelo, accidentes del paisaje, ecología y astronomía. Las coordenadas temporales definen relaciones con: otros sitios cercanos, contexto cultural, evolución histórica, contactos interculturales, desplazamientos intersitios, etc. La astronomía fue una herramienta útil para satisfacer el requerimiento de humanizar el espacio señalado por Criado (1991) y Jackson (2002) y para crear calendarios. Esta función parece ser un nexo común a todas las culturas. Por lo tanto podría ser una herramienta que permita darle explicación y significado a determinadas obras creadas por diferentes culturas precolombinas en diversas épocas y latitudes. Esta noción se sustenta en lo encontrado en diversos sitios arqueológicos de Chile, América y el mundo por autores como: Krupp (1983), Broda (1991), Aveny (1991), Liller (1996), Krupp (1997), Bauer y Dearborn (1998), Belmonte (1999: 259-278), Sprajk (2001), Bustamante (1991, 1996, 2003). Los trabajos de estos autores, muestran que las obras rupestres tuvieron un sentido astronómico, ritual, religioso, etc., pero, también pudieron tener un sentido utilitario como indicar pasos y caminos. Las obras rupestres para el ojo inexperto, aparentemente están distribuidas al azar en un determinado espacio. En muchos casos podrían ser complejos instrumentos de observación astronómica, que siguen funcionando después de 500 o 1000 años de ser abandonados por sus constructores. La construcción encontrada en la Quebrada Cavanilla (figura 2) constituye un instrumento de observación de alta precisión, que pudo haber permitido a sus constructores aproximarse a la medición del año trópico (365,24219 días), observando las pequeñas variaciones en la posición en el horizonte del ultimo rayo de sol en el equinoccio año tras año. Los hallazgos realizados a la fecha no permiten afirmar que tales mediciones hayan sido realizadas, pero la existencia de este instrumento, indica que estaban en capacidad de hacerlo. La observación de eventos solares durante el equinoccio fue una práctica extendida en Amèrica. Bauer y Dearborn (1998) muestran observación de equinoccios entre los Incas. William Liller (Liller 1996) señala 6 ahus con muros no paralelos a la costa con muros perpendiculares al equinoccio. Una relación entre obras rupestres y observación del equinoccio entre pueblos indígenas del noreste de México, es documentada por Murray (2003). En Chile la observación de la posición del sol durante el equinoccio ha sido descrita en la escala de Cuz Cuz (Bustamante 1991) (Boccas et al, 1999) y en el pasillo con orientación este oeste en el Pucará de Chena (Bustamante 1996) (Boccas et al 1999). La orientación de petroglifos en relación al equinoccio, no ha sido encontrada por ahora por otros autores en otros sitios con presencia de la cultura Molle. La especial ubicación geográfica de El Mauro (Castillo 2004) como cuenca muy cerrada con un solo camino de acceso en la actualidad, la gran cantidad de sitios allí encontrados (seelenfreund, 2001: 138) hace necesario realizar un detallado estudio de los antiguos caminos de acceso en tiempos históricos y en épocas precolombinas. También hace necesario realizar estudios del entorno climático, pues la única fuente de agua, el Estero Pupío, nace en este sitio y no cuenta con afluentes desde la cordillera. Esto genera una gran dependencia del clima local, limita la disponibilidad de este recurso y por tanto genera un microclima que influye en la flora y fauna (Larrain 2003: 7) y en la capacidad de crecimiento poblacional en tiempos prehispanicos. La relación jinetes-senderos, sugiere que los antiguos habitantes de El Coligüe pudieron adoptar el motivo ecuestre para reemplazar el motivo huellas presente en El Mauro, pero manteniendo el significado, es decir como señal de rutas. La posible relación petroglifos-senderos fue señalada por Jackson (2002) y Artigas (2004), pero, sin describir diseños específicos asociados.
V CONCLUSIONES Aquí se propone el uso del concepto obras rupestres (petroglifos, tacitas, pictografías, construcciones) en reemplazo del concepto arte rupestre, pues estas manifestaciones culturales trascienden el contexto de lo estético y autoral propio del arte occidental. Las relaciones señaladas entre obras rupestres y el contexto en que están insertas, sugieren la necesidad de introducir el concepto Entorno en el estudio de los sitios arqueológicos. El concepto Entorno abarca: a) Las obras (petroglifos, tacitas, pictografías, construcciones). b) El entorno cultural es decir todas las manifestaciones superficiales y en el subsuelo, asentamientos cercanos, etc. c) El entorno geográfico que incluye los accidentes del paisaje, la línea del horizonte circundante. d) El entorno astronómico (transito aparente de cuerpos celestes, sol, luna, estrellas, constelaciones y planetas). e) El entorno ecológico (clima, hidrografía, flora y fauna, que define la carga máxima de habitantes). El concepto Entorno, satisface la necesidad de realizar estudios multidisciplinarios que incluyan las variables descritas (Larrain 2003)(figura 7).
La relación Obras Rupestres - Entorno, señala que, girar, mover o trasladar las obras de su emplazamiento original, modifica datos relevantes, que impide establecer posibles relaciones y no permite la interpretación de las obras rupestres. La aplicación de este nuevo enfoque multidisciplinario, es necesaria especialmente en sitios que serán permanentemente alterados debido a obras mineras, crecimiento poblacional, labores agrícolas, etc. Agradecimientos A mi esposa Angélica por su infinita paciencia, a Pancho y Christiane, a la familia Ordenes, a los alumnos del taller Sangatai de arqueoastronomía, a Alejandra Guerra, a todos los hombres, mujeres, niños y niñas que anónimamente y con generosidad han aportado para el desarrollo de esta investigación. A los antepasados que nos legaron estos invaluables tesoros. A la generosa madre tierra, que sustenta nuestra existencia y sufre nuestros agravios. ¿Preguntas, comentarios? escriba a: rupestreweb@yahoogroups.com Cómo citar este artículo: Bustamante,
Patricio.
Entorno:
obras rupestres, paisaje y astronomía en El Choapa, Chile.
2005
REFERENCIAS CITADAS Artigas D. 2004, Dibujando el camino a la costa: Disposición del arte rupestre y uso del Valle de Canelillo a través del tiempo. En: Actas de Taller de Arqueología de la Provincia del Choapa. Universidad SEK. En prensa. Aveni Anthony, 1991, Observadores del cielo en el México antiguo, Fondo de Cultura Económica, México. Bauer B. y Dearborn D. 1998 Astronomía e Imperio en Los Andes. Centro de Estudios Andinos Bartolomé de Las Casas, Cusco: 95,97 Belmonte J. 1999 Astronomía y civilizaciones antiguas, Ediciones Temas de hoy, Madrid: 259-278 Boccas M., Bustamante P., González C., y Monsalve C. 1999 Promissing archaeoastronomy investigations in Chile", En: actas del Congreso OXFORD VI and SEAC 99, Astronomía y Diversidad Cultural, Organismo Autónomo de Museos del Cabildo de Tenerife, Tenerife. Vol 1: 115 123. Broda J. 1991, Cosmovisión y observación de la naturaleza: El ejemplo del culto de los cerros en Mesoamérica. En: Actas de Simposio Arqueoastronomía y Etnoastronomía en Mesoamérica. Universidad Autónoma de México, 1991 461. Instituto de Investigaciones Históricas. Editores Johanna Broda, Stanislaw Iwaniszewski, Lucrecia Maupomé. Bustamante P. 1991 Astrónomos antes de Illapel, Suplemento Siglo XXI, Diario El Mercurio, 5 de Septiembre: 6, 7. Bustamante P. 1996, La huaca del cerro Chena, Revista CIMIN, N° 61: 32-35 Bustamante P. Tuki J., Huke K., Tepano J., Tuki R. 2003, Empleo de astronomía y geometría básicas en el emplazamiento de sitios y en la división territorial durante el reinado de Hotu Matua en Rapa Nui, Instituto de Estudios de Isla de Pascua, FAU, Universidad de Chile. www.isladepascua.uchile.cl Castillo G. 2004, Borrador de informe arqueológico Mauro y Monte Aranda. Manuscrito. Criado F. 1991, Construcción social del espacio y reconstrucción arqueológica del paisaje, Revista de Antropología Americana: 5-29. Guerra A. 2003, Informe Rescate, puesta en valor y difusión del patrimonio arqueológico de la comuna de Canela, Proyecto FONDART 0050668. Manuscrito. Jackson D., Artigas D., Cabello G. 2002, Trazos del Choapa, Arte rupestre en la cuenca del Choapa una perspectiva macroespacial, Proyecto DID S00 12/2, Universidad de Chile: 1003. Krupp E. 1983, Echoes of the ancient skies, The astronomy of lost civilizations, Oxford University Press. Krupp E. 1997, Skywatchers, Shamans & Kings. Wiley Popular Science, John Wiley & Sons, Inc. USA. Liller W. 1996, Los antiguos observatorios solares de Rapa Nui, La Arqueoastronomía de Isla de Pascua. The Easter Island Foundation: 16. Easter Island Foundation, California, USA. Larrain H. 2003, Efectos Previsibles de Carácter Irreversible de la Posible Instalación de un Tranque de Relaves de la Minera "Pelambres", en el Sector del Fundo "El Mauro", Comuna de Los Vilos, IV Región. Universidad Bolivariana, Sede Iquique. Murray W. 2004, El equinoccio entre los pueblos amerindios del noroeste mexicano. Etno y Arqueoastronomía en Las Américas, En: Actas del Simposio ARQ-13 del 51º Congreso Internacional de Americanistas ICA 51, Boccas, Broda y Pereira Editores: 243-254 Seelenfreund A, 2001, Informe Técnico de Arqueología para el Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto Embalses de Relave de Monte Aranda, Mauro y Ducto de Transporte de Relaves. Comuna de Los Vilos, Provincia del Choapa,IV Region. Co. Minera Los Pelambres. Sprajc I., 2001, Orientaciones astronómicas en la arquitectura prehispánica del centro de México, Serie Arqueología, Instituto Nacional de Antropología e Historia. México D.F.: 43 Steuven H. 1973 Cartas solares para 43 localidades de Chile y Argentina, Universidad de Chile, ediciones Facultad de Arquitectura. [Rupestreweb Inicio] [Introducción] [Artículos] [Noticias] [Mapa] [Investigadores] [Publique] |