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Destrucción de la Cueva número uno de Borbón.
Denuncia
pública
Gabriel
Atiles Bidó gabrielatiles912@msn.com
Por medio del presente artículo
pongo en conocimiento de la opinión pública nacional
e internacional, en mi condición de investigador del arte
Rupestre dominicano, ex director del departamento de arte rupestre
y Espeleología del Museo del Hombre Dominicano, Secretaría
de Estado de Cultura y profundo conocedor de las cuevas del Pomier
o Cuevas de Borbón en la Provincia de San Cristóbal.
La destrucción de la Cueva
Patrimonial Numero Uno de Borbón, reportada 1851, en San
Cristóbal, por la implementación de un proyecto sin
los estudios arqueológicos ni estudios de impacto, sin la
presencia de los técnicos calificados y de las instituciones
del país creadas para tales fines; y a quienes le fue impedida
la entrada en una conducta que viola la ética profesional
y todas las leyes dominicanas en tales sentidos.
Quien sustenta participó
en los trabajos de conservación de dicha cueva en los años
90, en calidad de restaurador encargado de los trabajos de remoción
de los graffiti junto al Museo del Hombre Dominicano, el Profesor
Pagan Perdomo y el Espeleogrupo de Santo Domingo.
Queremos de manera preliminar mostrar
la magnitud de la destrucción ha que ha sido sometida la
cueva por parte de la Secretaria de Estado de Medio Ambiente en
la gestión anterior.
•Este tunel que se aprecia
en la foto es un corte en la roca de mas de dos metros cincuenta,
que se interna en la cueva y se mantiene en todo el trayecto.
•La cueva con un desarrollo
de setecientos metros en los lugares en rojos son gateras por donde
había que pasar reptándose, estas áreas fueron
cortadas con martillos neumáticos, dos metros por nivel del
suelo, desalojando toda la estratigrafía, y creando polución
que debió cubrir todos los petroglifos y todas las pictografías
con el polvo resultante de este corte mecánico de caliza. Consideramos que tal embate es peor que la
condenada práctica de tizar petroglifos.
•Los setecientos metros de
desarrollo de la cueva fueron excavados a golpe de martillos neumáticos
y luego se vació todo el espacio que se ve sombreado de gris,con
varias pulgadas de concreto, se subieron block para los pasamanos
los cortes en las paredes fueron pañetados con una argamasa
que ya de se esta desprendiendo y se compensaron los desniveles
de la cuevas con escaleras y en algunos casos pasamanos metálicos
que es una ofensa visual.
•Los cambios implementados a
la cueva Numero Uno de Borbón en la provincia de San Cristóbal
son violatorios de las leyes de patrimonio cultural y violatorios
a de las ley Medioambiental en el CAPÍTULO VII DE LAS CUEVAS,CAVERNAS
Y EL AMBIENTE SUBTERRÁNEO Art.160. Se declaran patrimonio
natural de la nación las cuevas, cavernas y demás
cavidades subterráneas naturales del territorio naci onal.
Se prohíbe toda alteración física de sus características
naturales y culturales, así como las extracciones de sus
formaci ones secundarias,materiales paleontológicos,arqueológicos
o de cualquier clase,naturales o culturales de su interior,y la
introducción de desechos y objetos de cualquier ti po que
puedan alterar las condiciones del equilibrio ecológico existente.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
es una cueva activa,con una gran y contínua actividad hídrica.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
presentaba y presenta especies propias del ambiente subterráneo
que no fueron consideradas en su valor científico y natural
a la hora de destruir el equilibrio biológico de la cueva.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
atesoraba una importante fauna extinta de la isla española
la cual fue removida de manera inconsulta y arbitraria privando
a la ciencia y a la humanidad del conocimiento y estudio de tales
formas de vida.
•La Cueva Numero Uno de Borbón,
en ella fue determinada la presencia de restos óseos probablemente
de aborígenes de la isla Española los cuales fueron
removidos sin la presencia de las autoridades creadas para tales
fines aun se aprecian restos esparcidos por la cueva.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
era presumiblemente un cementerio o yacimiento arqueológico
el cual fue removido sin la presencia de arqueólogos.
•La Cueva Numero Uno de Borbón es depositaria
de arte rupestre grabado en piedra del cual suponemos pueda haber
sufrido consecuencias por el corte de miles de metros de rocas en
la entrada y por el movimiento arbitrario y con mano de obra y equipos
no calificado para un trabajo en un área de interés
a la cueva le fueron convertidas en entradas claraboyas, lo que
puede dar una idea de los movimientos allí efectuados.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
es depositaria de más de setecientas pictografías,
pinturas realizadas en color negro, diseminadas por toda la cueva,
las cuales pueden haber sufrido durante la salvaje destrucción.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
presenta alteraciones físicas en sus aspecto natural que
nos hacen temer por la preservación del arte rupestre allí
depositado
•La Cueva Numero Uno de Borbón
al ser una cueva activa y habérsele destruido sus condiciones
naturales de equilibrio está reaccionando de manera al parecer
no prevista por sus ejecutores.
•La Cueva Numero Uno de Borbón
presenta vicios y deformaciones que la hace no elegible para un
turismo ecológico, toda vez que se ha deformado y convertido
en una estructura de cemento perdiendo las características
del entorno que describe.
•Tenemos algunas incertidumbres
sobre seguridad.Vicios de construcción, aspecto de salubridad,
acumulación de aguas sin el percolado natural y las deposiciones
de murciélago.
•Esta cueva debe ser intervenida
por departamentos de salubridad.
Conclusiones
Los cambios en La Cueva Numero Uno
de Borbón, violatorios de las leyes dominicanas, desordenados,
carentes de estudios, desproporcionados, grotescos y destructivos
de fauna fósil, de restos arqueológicos, de las formas
de vida del ambiente subterráneo, del equilibrio biológico
de la cueva del aspecto natural y que pone en peligro los recursos
que aún permanecen ameritan una condena pública.
La magnitud del desastre hace imprescindible
una investigación por un equipo multidisciplinario, que a
falta de todos los estudios ,mandatarios de la ley y que fueron
obviados con evidente mala fe, deben ser los elementos de juicio
para las discusiones sobre el destino de la cueva y de futuros proyectos.
La imposición y ejecución
de estos proyectos por parte de una Secretaría creada para
la salvaguarda del Patrimonio, es una cuestión que debe llamarnos
a preocupación.
La Cueva de Borbón y otras
cuevas víctimas del mismo destino deben ser objeto de tal
investigación a fin de determinar las medidas a implementar.
Las áreas depositarias de patrimonio cultural o monumental
no son de la propiedad de las instituciones encargadas para velar
de conservación o encargadas de su manejo
Es una cuestión de nuestros
Congreso que nunca más sean destruidos por las visiones personales
de funcionarios o de gobiernos de turno el patrimonio histórico
y cultural que nos legaron nuestro antepasados y que les pertenece
a todos los dominicanos las futuras generaciones y a la humanidad.
—¿Preguntas,
comentarios? escriba a: rupestreweb@yahoogroups.com—
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