Arte rupestre Piedras grabadas de cuatro lunas Cuba

Roberto Ordúñez Fernández. Grupo cubano de investigaciones del Arte Rupestre (GCIAR) - Gabinete de arqueología de Baracoa, Guantánamo. arqueologordunez@correodecuba.cu

Coautores
Yannara Ordúñez Cesar. Gabinete de arqueología de Baracoa
Yosmani Correa Suárez. Gabinete de arqueología de Baracoa

Baracoa, provincia Guantánamo, Cuba, Trabajo presentado en la XI Conferencia Internacional de Antropología 2012; la Habana, Cuba

Muchas semanas luego de tanto trabajar, después
de la segunda guerra mundial, los aliados encontraron
unos documentos alemanes que contaban el desarrollo
de la batalla de las Ardenas y prácticamente
no tenía nada que ver con los relatos oficiales de los aliados.

Solo 60 días separaban unos hechos de los otros...
y la mayor parte de la historia se ha escrito siglos
más tarde de sus sucesos.

Joaquín Mititieri

Los antiguos grupos humanos desde sus inicios le dieron una necesidad fundamental al conocimiento, era la única manera de su subsistencia. Su vida natural y su enfrentamiento a sucesos naturales y sociales les obligó necesariamente a buscar una respuesta para dar solución a estos fenómenos. Por tal razón para estos primeros hombres era necesario conocer el comportamiento de los días, las noches y los diferentes eventos naturales que ocurrían en diferentes épocas. Su poder triunfal sobre esta situación estaba dado en conocer el mundo, las plantas, los animales, su desarrollo, la tierra, siendo necesario entender cuales eran las épocas de catástrofe, pero también las épocas para mejor cultivo, ya que con ellos estaba dado el mantenimiento de sus vidas.

Muchas de las antiguas culturas del Mundo, dejaron mediante códices y símbolos jeroglíficos en las paredes de las cuevas y cavernas, en las piedras, huesos, cerámica y la madera la manera en que ellos vieron el mundo y como lo interpretaron, de igual manera nos dejaron mensajes de los distintos sucesos ocurridos en aquel entonces. Hoy estudiosos e investigadores por profundos análisis han podido descifrar la historia de esos antiguos hombres y son las razones por lo que les conocemos no solamente a ellos sino también a los procesos naturales, políticos y sociales a los que se enfrentaron.

Los primeros y mas antiguos, dibujos y grabados de constelaciones que se conocen están compuestos por diferentes motivos elaborados en piedras, conchas, y vasijas, ya hombres de una etapa Paleolítica le dieron gran empleo, de igual forma, los Sumerios la emplearon y quedaron como pruebas arqueológicas en tableros de juego que ellos utilizaban. Tal situación nos dice que las constelaciones ya habían sido establecidas desde el año 4000 a.C.

Mediante este trabajo, tratamos de dar a conocer algo significativo y novedoso basado en un profundo estudio de un gran conjunto de símbolos grabados en piedras sueltas o portátiles localizados en el sitio Cuatro Lunas en esta localidad de Baracoa. Para poder descifrar cada uno de estas escrituras grabadas en un conjunto de mas de 60 piedras, el autor se basa fundamentalmente en un largo trabajo de campo de mas de 10 años, y un profundo estudio bibliográfico de interesantes obras relacionadas con el tema de destacados e incansables hombres de ciencias, como el arqueólogo español Joaquín Mititieri quien por muchos años ha venido realizando interesantes investigaciones sobre las piedras grabadas del Desierto de Ocucaje de la región de Ica situado en la parte sur del Perú, junto a otro estudioso de este tema como el Doctor Javier Cabrera, así como leyendas de los sabios indígenas e informes obtenidos de los estudios del clérigo Ramón Pané. Por otra parte se utilizaron estudios comparativos con los códices Mayas, apuntes del libro de Chilan Balán, y aspectos importantes del libro “Cartografía de lo que Es”.

Con el presente estudio únicamente pretendemos dar un aporte a las ciencias cubanas y del Caribe e invitar a profundizar un poco más sobre el estudio de las piedras grabadas presentes quizás en muchos de los diferentes sitios arqueológicos y que a veces no son de un tema de análisis con profundidad. Tratamos de demostrar la importancia que estos pobladores le dieron al uso y empleo de los conocimientos basados en las interpretaciones y las observaciones constantes de las constelaciones.

La gran mayoría de las culturas más antiguas de la humanidad casi siempre asociaron las constelaciones con figuras religiosas o mitológicas, animales u objetos, de igual manera que un gran número de personas en la actualidad.

Fundamentamos este estudio basado en el descubrimiento de una piedra con extrañas marcas grabadas bajo relieve, localizada en el sitio Cuatro Lunas de esta localidad de Baracoa el 4 de Octubre del año 2008 por los licenciados Roberto Ordúñez y Yosmani Correa, miembros de la Sociedad Arqueológica de Baracoa, en tal sentido al ser analizada la pieza en trabajos de gabinete se pudo comprobar que nos encontrábamos ante un reto de gran profundidad, trabajos de campo y estudios posteriores sumaron nuevos elementos de interés los cuales tratamos en esta investigación

Cuatro Lunas es un interesante Sitio Arqueológico que está constituido por un área de más de 200 metros de fertilidad arqueológica que bordea un centro a manera de sumidero el cual da origen de una manera intermitente a una pequeña laguna, la que aumenta su caudal en tiempo de lluvias producto de grandes concentraciones de agua proveniente de los alrededores. Esta debe haber constituido una gran reserva de este preciado líquido para el consumo diario de las comunidades primitivas que habitaron este lugar. En los sectores SE de la misma se observan grandes acumulaciones de guijarros, muchos de los cuales con interesantes gravados. Este conglomerado o agrupamiento de piedras sueltas tal parece que formaban un tapiz en todo el borde de la laguna y que al parecer fungió además como centro ceremonial.

Como decíamos con anterioridad una vez haber descubierto la primera piedra grabada en el año 2000, nos dimos a la tarea de efectuar reiteradas expediciones al lugar y al observar allí varias de estas piezas agrupadas en algunos sectores del área nos daba a entender que estas piedras cumplían algún papel muy necesario. Se observan además grandes emplazamiento de piedras a manera de adoquines como formando un camino alrededor de la mencionada laguna o charca fluvial.

Suponemos que la utilización de este lugar, según nuestro criterio parece ser un centro ceremonial, el cual estuvo dirigido por la persona savia, hechicero o Chaman designado para este propósito, era el encargado de esta actividad ya que sobre el estaba dada toda responsabilidad de sabiduría, el que en dependencia de los acontecimientos naturales vividos en estrecha relación con los problemas sociales iría grabando las piedras pero sin perder una relación necesaria con los fenómenos astrales ya que así lo demuestran las piedras gravadas, tal situación le permitiría tener de esta forma un calendario asociado con el comportamiento de las constelaciones, los que quedaban gravados y por supuesto guardados en estas piedras para después tener un complemento de los diferentes sucesos cósmicos, políticos y sociales vividos, también el calendario creado les permitiría tener un mejor demonio del tiempo, de las épocas para la siembra y la cosecha de determinados y necesarios productos, así como la necesidad de ver La Luna como medio de orientación nocturna y en dependencia de sus fases llena o media con su forma de D o fase decreciente o menguante con su forma de C desarrollar con certeza una mejor utilización de los días propicio para la tala de árboles y para desarrollar con efectividad sus labores agrícolas y enfrentamiento a diferentes sucesos. El clérigo Ramón Pané en sus escritos nos deja testimonios claros sobre el dominio por estos hombres primitivos de las 4 lunas, donde el cuatro era un número simbólico de gran importancia, el que constituía un todo o una entidad única, también para los Tainos constituía la eternidad o el infinito, pero que también cuatro era según ellos las cuatros fases de la luna y los meses lunares que en relación con los análisis astronómicos podían ellos medir el tiempo. Está muy claro el conocimiento por parte de estos antiguos grupos sobre la primera, segunda tercera y cuarta luna, lo que estaría claro también para ellos los 28 días del mes lunar compuesto por las 4 lunas las que hoy conocemos como Luna Nueva, Luna Cuarto Creciente, Luna Llena y Cuarto Menguante y tienen que ver con mucha exactitud con el comportamiento de las plantas, la vida animal y humana. De singular importancia son las piedras con perforaciones descubiertas como representando las diferentes fases de la luna, en unas de las piedras aparecen las tres lunas acercándonos a la fase menguante (comienzo de la cosecha), de igual manera que la Cruz del sur que para muchos grupos antiguos de América era el comienzo de la cosecha, esta cruz que como constelación se encuentra ubicada encima del círculo polar antártico del hemisferio sur, aparece entre Centauro y la Mosca.

Las diferentes lunas duran casi 7 días los que completan los 28 días del mes lunar.

Piedras de 20 cm de largo por 13 cm de ancho, del tipo Peridotita. La piedra muestra varias decoraciones a manera de cuadros y en su parte superior un conjunto de puntos que nos acercan a las constelaciones. En un extremo como elemento central perece representar una persona en bajorrelieve de perfil con una cruz en las manos, puede ser también una coa, como indicando la cosecha, Delante de la figura aparecen tres puntos circulares de menor a mayor donde el punto mayor nos da la impresión del ojo del personaje, pero que al mismo tiempo el primer circulo, es el mas pequeño y quizás esté representando la luna naciente luna nueva, un segundo circulo mas grande que el primero parece acercarnos a la luna creciente, pues este no está completo, sino mas bien en forma de C. El tercer punto aunque no es circular completo es el mas grande el cual es el ojo de la figura y parece representar a la luna en su tercer fase Cuarto Menguante, que es la época de recolección, de la cosecha. A la izquierda del personaje se observan varios trazos formando cuadros , quizás sea este la representación de las cuatros lunas que componen el mes lunar, recordemos que según el Clérigo Ramón Pané en sus escritos nos deja testimonios claros sobre el dominio por parte de los antiguos del Caribe de las 4 lunas, donde el cuatro era un número simbólico de gran importancia, el que constituía un todo o una entidad única, también para los Tainos constituía la eternidad o el infinito, pero que también cuatro era según ellos las cuatros fases de la luna y los meses lunares que en relación con los análisis astronómicos podían ellos medir el tiempo.

Dan completamiento a la piedra otros trazos y un conjunto de puntos en lo que pudiera ser su parte superior los que al parecer representan el conjunto de estrellas y planetas que forman las constelaciones.

Piedra muy interesante de 14,3 Cm de largo por 11,6 Cm de ancho, del tipo Peridotita, en la que se observan varios trazos circulares y oblicuos los que en su conjunto nos hacen pensar en la representación animalística quizás de un ave. Muy relacionados entre los trazos que conforman la figura central pero en su interior, se observan varios perforaciones pequeñas a manera de puntos como dando completamiento al animal representado, pues obsérvese que los puntos no salen al exterior, salvo dos en la parte inferior que parecen representar las patas de la figura.

Piedras de 13,6 cm de largo por 11,1 Cm de ancho, de origen ígneo metamórfico con cuatros círculos, de los cuales uno apenas se puede apreciar, el que parece representar la luna nueva, otros tres círculos mas profundos que el primero de forma continuada parecen representar las otras tres fases de la luna, uno en forma de C, el otro ya como una C también pero con mas espacio cubierto y un cuarto circulo completo el que sin duda nos permite pensar en la luna llena. .

Piedras de forma casi triangular de 12,2 cm en su eje mas largo del tipo de rosca ígnea metamórfica. La interesante pieza en el plano principal deja ver con claridad un punto profundo y otros trazos de contornos, los que forman con claridad la cara de una figura animalística, la que en su forma se acerca a la cabeza de una iguana. Girando la pieza y vista desde otro ángulo deja ver la representación de una figura humana.

Interesante pieza de origen metamórfico de forma casi triangular y formando al mismo tiempo tres caras principales y una cara de apoyo, todas sus caras poseen grabados muy difíciles de interpretar, aunque en ocasiones resalta en una de sus caras al parecer una figura animalística. En su base los trazos del tipo geométrico son gruesos y profundos, pero lo interesante aquí es que se observa una página artificial que cubre las incisiones de los grabados, lo que nos da a entender que el autor utilizó algún tipo de pigmento negro muy fuerte, los que hacen resaltar los símbolos gravados.

Piedras del tipo Peridotita. La interesante piedra muestra en una de sus caras unos trazos profundos, los que dan a entender con los otros trazos a una representación animalística al parecer de un cangrejo o una rana.

Piedra muy interesante de 20,1 cm en su parte más ancha por 10,2 cm en la que se observa con claridad la representación de una figura animalística que nos acerca a una tortuga, pues como continuación de su cabeza alargada con su ojo representado se deja ver el enorme caparazón del animal. En su parte trasera dos trazos como mostrándonos la cola y en su parte inferior dos nuevos trazos nos muestran con toda claridad las patas del animal.

Interesante Piedra de 17,3 cm de largo por 7,6 Cm de ancho, en la que sobresalta un trazo profundo y circular que da con claridad la imagen de un ojo con un pequeño trazo en su interior. Este motivo parece ser el mismo utilizado a muchos de los ojos representado por nuestras anteriores culturas de una etapa Neolítica en la confección de ídolos y motivos decorativos de cazuelas.

Piedra No. 9

Piedra del tipo Peridotita. Este interesante grabado muestra con claridad la representación de una Rana de perfil. Sobre salta un circulo delantero que da la impresión de la cabeza. La forma semi-ovoide de la figura parece representar este animal echado sobre sus patas traseras.

Piedra del tipo Peridotita, la que muestra varios trazos profundos que en ocasiones se cruzan formando caprichosas figuras. La presencia de tres puntos gruesos y profundos en unos de sus extremos, parece representar una figura antropomórfica.

Interesante Piedras de 13,5 cm de largo por 11 Cm de ancho, en la que sobre salta un conjunto de 5 puntos de manera circular los que dan con claridad la idea de la posible representación de la Osa Menor, constelación del hemisferio norte, situada muy cerca de la Osa Mayor. La que se puede ver desde cualquier punto del hemisferio norte de la Tierra en noches despejadas.

Piedra del tipo ígnea metamórfica de 17,3 cm en su parte más ancha por 9,2 cm en su parte mas estrecha, en la misma se aprecian unos surcos de 5 mm como máxima profundidad. La interesante pieza muestra una figura animalística que nos acerca a un insecto saltador al parecer una langosta o Saltamontes migratorios, especie de animales que a manera de plaga ocasionan muchos daños a las cosechas. Por lo que se puede observar, sus autores utilizaron inicialmente algún instrumento de percusión para poder realizar los trazos que forman la figura, pues se observan pequeñas perforaciones de puntos los que fueron rematados por otro método de pulido de los referidos trazos que dan forma a la esquematización. La pieza en uno de sus extremos muestra también dos trazos circular como partidos por el medio por otros trazos, al mismo tiempo dan la idea de dos ojos al parecer también relacionados con algunas figuras animalísticas.

Después de un largo trabajo de análisis, comparación y estudios de los elementos líticos gravados que nos aportó el sitio Cuatro Lunas y por la profundidad de los conceptos mitológico aportados, entendemos que estas conclusiones son preliminares y no concluyentes, ya que posteriores estudios aportaran con seguridad nuevos aportes que permitirán dar una conclusión mas acertada del tema. No obstante, aunque preliminar así concluimos esta parte de la investigación.

1- Se reporta un sitio arqueológico de singular importancia que brinda nuevos elementos mitológicos para el estudio de nuestras comunidades Arahuacas presentes en esta región del oriente de Cuba.

2- La metodología y análisis empleada para el estudio cualitativo brindará una importante fuente de información para futuras investigaciones. Por lo que entendemos que estos elementos pueden ser por estudiosos del tema para ampliar investigaciones relacionadas con la Mitología Arahuaca en Cuba.

3- Teniendo en cuenta elementos cerámicos como vasijas y morteros ceremoniales de terracota encontrado en el área, es que asociamos las piedras grabadas con que sus autores pertenecieron a los llamados grupos Tainos de una etapa Neolítica Tardía.

4- Por lo que se puede observar en el estudio de 12 piedras grabadas de un total hasta el presente de 60, suponemos que estamos en presencia de un centro ceremonial donde todo el análisis realizado por el Chaman o Behique giraba en una estrecha relación con las cuatros fases de la luna, tema del cual Ramón Pané dejó elementos muy claros.

5- El método o técnica utilizada en las confección de los grabados sin duda fue el de percusión o punteado con un instrumento agudo y una vez haber conformado la idea plástica dar el remate final de la figura mediante el raspado, pues en algunos de las piedras se observan con claridad las marcas de estos métodos.

6- El conjunto de piedras gravadas localizadas y otros elementos arqueológicos del área da entender el uso ceremonial al que fue sometido el lugar, donde las piedras con grabados, al estar tan relacionadas con las constelaciones, sitúan al lugar al parecer como un centro de observación astronómica.

7- En algunos de los grabados se observa también que en sus trazos el autor utilizó algún tipo de pigmento negro muy fuerte después de haberlos desarrollado para por algunas razones hacer resaltar los símbolos gravados.

8- Entendemos que estas piedras sin duda nos dejaron un mensaje de su pensamiento y de cómo sobrevivir en el tiempo, está claro que necesariamente analizaron e interpretaron el ambiente, este era un recurso mas que necesario, obligatorio para ellos, un fallo con seguridad le costaría el colapso colectivo, por tanto dibujar el conocimiento adquirido de su análisis astral en relación con el comportamiento de su vida, de la vida de los animales, de las plantas, su desarrollo, tener esa educación ambiental, mediante la observación de las cuatros fases de la luna era el triunfo para poder llevar una economía perfecta sobre toda tipo de adversidad.

9- Nos demuestran estas piedras que estos grupos humanos no solamente pensaron en vivir en su tiempo, sino que pensaron en como enseñar a sus generaciones futuras, de cómo seguir llevando sus experiencias, sus conocimiento ambiental de generaciones en generaciones, según nuestro criterio estas piedras grabadas constituyen un contribuidor importante para el desarrollo de su dieta, de sus recursos, de sus historias y ceremonias.

Ordúñez Fernández, Roberto. Piedras grabadas de Cuatro Lunas. En Rupestreweb, http://www.rupestreweb.info/cuatrolunas.html

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